Luego del estreno de La bohème, una reseña en prensa dijo que la obra de Giacomo Puccini “no dejará una gran huella en la historia de la ópera”. Grave error cometió el analista de turno, ya que 128 años después de su primera presentación en el Teatro Regio de Turín (Italia), La bohème es uno de los títulos más populares del repertorio operístico mundial y una gran puerta de entrada a esta manifestación artística.
¿Qué es lo que más conquista al público cuando ve La bohème? Podríamos ensayar muchas respuestas. Tal vez es la conmovedora historia de amor del poeta Rodolfo y la costurera Mimì; el aire de juventud, alegría y bohemia que hay alrededor de la obra. O podemos ir más allá y pensar en la dramaturgia que, unida firmemente a una partitura muy poética escrita por Puccini, crean una obra de arte inolvidable.
La bohème es una ópera llena de grandes momentos como la escena del enamoramiento entre Rodolfo y Mimì en el primer acto; la espectacularidad de los conjuntos y escenas corales en el segundo acto; la atmósfera melancolía y aflicción del tercer acto: una de las páginas más conmovedoras de la historia del teatro mundial; y, finalmente, el cuarto acto, en el que la tragedia llama a la puerta y los jóvenes artistas bohemios se enfrentan a las dificultades de la vida real.
Esta ópera pertenece a la corriente verista (realista) y Puccini transmite al espectador, a través de su partitura, los sentimientos de amor y ardor juvenil, alegría desenfrenada, sensualidad, melancolía y el punzante dolor al enfrentarse a la muerte del ser amado. Se dice que el compositor confesó que lloraría “como un niño” con la escena final que había escrito. Ahí está la magia de La bohème.
En esta ocasión, el Festival Granda presenta una nueva producción de La bohème a cargo del director de escena Jean Pierre Gamarra, y protagonizada por jóvenes y excepcionales artistas en un reparto encabezado por el tenor peruano Iván Ayón Rivas y la soprano albano-boliviana Carolina López Moreno. La dirección de orquesta estará a cargo del maestro Alessandro Bonato.
La bohème
Ópera en cuatro actos, con música de Giacomo Puccini y libreto en italiano de Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, basado en episodios de Scènes de la vie de bohème, de Henri Murger, de 1845. Estrenada el 1 de febrero de 1896 en el Teatro Regio de Turín (Italia).
Nueva producción del Festival Granda
GRAN TEATRO NACIONAL
26 y 30 de abril de 2024 20:00 horas
28 de abril de 2023 17:00 horas
Lugar: París, Francia Tiempo: Invierno, primavera, alrededor de 1830
Acto I
El poeta Rodolfo y su amigo el pintor Marcello pasan la Nochebuena en una pequeña habitación cerca del Barrio Latino de París. Ambos luchan contra las carencias y el frío quemando los manuscritos de Rodolfo en una chimenea. El joven filósofo Colline se une a ellos hasta que Schaunard, el músico del grupo de amigos, anima a los tres bohemios a cenar fuera de casa en la víspera de la Navidad.
De pronto llega Benoît, el casero, y les pide pagar el alquiler. Los cuatro artistas distraen al dueño de la buhardilla con un poco de vino y comentarios sobre mujeres y aventuras amorosas. Cuando Benoît admite ser mujeriego, los jóvenes fingen escandalizarse y lo echan de la habitación sin pagarle las cuentas. Marcello, Schaunard y Colline van hasta el Café Momus, mientras Rodolfo decide quedarse para terminar un artículo.
En ese momento, Rodolfo oye unos golpes en la puerta y encuentra a una joven que necesita un poco de fuego para calentarse en aquella fría noche de invierno. Se trata de Mimì, que al entrar en la habitación tose fuertemente y se desmaya. Rodolfo logra reanimarla con un poco de vino. Ella pierde su llave y él la ayuda a buscarla en el suelo. En un gesto de astucia, Rodolfo apaga la vela de Mimì y toca su mano mientras ambos buscaban la llave en el suelo. Él conmovido por sentir la mano fría de su vecina, decide presentarse (Che gelida manina). Luego de escucharlo, Mimì se presenta formalmente ante Rodolfo y le cuenta lo que hace (Si, mi chiamano Mimì). A lo lejos, los amigos de Rodolfo lo llaman para unirse a la fiesta en Momus, pero en la habitación Rodolfo y Mimì abren su corazón y se entregan al amor (O soave fanciulla).
Acto II
En el Barrio Latino está el Café Momus. Rodolfo le ha comprado a Mimì una gorrita rosada, justo antes de encontrarse con el grupo de amigos. Toda la calle es una fiesta, pero Marcello arruina su alegría al ver a su ex amante, Musetta, con Alcindoro, un pretendiente mucho mayor que ella. Musetta trata a su amante de turno con desdén y, al mismo tiempo, coquetea con Marcello (Quando me’n vo). La joven finge que le duelen los pies y le pide a Alcindoro que le compre unos zapatos nuevos. Ella vuelve a los brazos de Marcello en un gesto de reconciliación con su ex amor. De pronto, el mesero trae la cuenta, que supera al poco dinero que tienen los bohemios. Musetta junta su cuenta con la de los artistas y la deja en la mesa para que todo lo pague el viejo Alcindoro.
Acto III
Algunos meses más tarde, Mimì le cuenta a Marcello que debe dejar a Rodolfo por sus celos constantes. El pintor habla sobre el tema con su amigo Rodolfo. El poeta inicialmente asegura estar celoso, aunque luego confiesa seguir amándola, pero la grave enfermedad de Mimì y la pobreza por la que pasan ambos no la mantendrá con vida. La tos delata a Mimì, que se hallaba escondida por la taberna. Marcello y Rodolfo se dan cuenta de que ella estaba escuchando todo. Ella cree que le queda poco tiempo de vida. Rodolfo quiere llevarla a la taberna, pero ella se niega. Se quedan hablando afuera y, con mucho pesar, Mimì se despide de su amado (Donde lieta uscì). Al darse cuenta de que la relación terminará, acuerdan quedarse juntos hasta que empiece la primavera.
Acto IV
Llegada la primavera, nuevamente en la buhardilla de los bohemios, Rodolfo y Marcello intentan olvidar sus amores perdidos. Llegan a casa Schaunard y Colline y empiezan a jugar con sus dos amigos. De pronto, muy agitada, irrumpe Musetta quien tiene cerca a Mimì en el peor estado de salud. En un acto de solidaridad, Musetta vende sus joyas para poder pagar al médico. El filósofo Colline también ofrece en venta su abrigo para conseguir un poco más de dinero. Cuando los dos ex amantes se quedan a solas, Mimì vuelve a confesar todo su amor por Rodolfo y recuerda todos los momentos que pasaron juntos, hasta que ella dice que quiere dormir. Los demás vuelven a la buhardilla con medicina y un poco de fuego para calentar la habitación.
De pronto, Schaunard, el músico, se percata de que Mimì ya no está dormida: ha muerto. Impactados por el suceso, ellos no saben cómo dar la noticia a Rodolfo. Cuando se da cuenta de que su amada Mimì ha partido para siempre, el poeta rompe en llanto.